La banda PVRIS (se lee ‘Paris’) constituye uno de los vínculos más interesantes entre el pop y el rock en lo que respecta a la música contemporánea. En tiempos en que el pop-rock no está muy de moda, la banda ha logrado seguir su propio estilo, que de hecho está clasificado como «alternativo«, y ha ido ganando cada vez más elogios a lo largo de los años.
En su era discográfica actual, que comenzó hace unos meses con el single «Hallucinations«, la banda también está experimentando desde un punto de vista visual con videos muy oníricos e imaginativos, llenos de figuras vagamente inquietantes y altamente «extrañas» enriquecen su música y llegan al espectador con gran energía. El nuevo single «Gimme A Minute» no es una excepción.
Mira el vídeo de Gimme a minute, el nuevo de PVRIS
La canción es un mid-tempo con un sabor puramente electrónico, que a pesar de comenzar con una producción muy mínima en las estrofas, se enriquece cada vez más con sonidos hasta que explota en un estribillo que podríamos encontrar fácilmente en un álbum electro-pop de la década de 2000.
Cambia radicalmente en el final, en el que el alma de rock del grupo resurge con más fuerza: la excelente interpretación vocal de la cantante Lynn Gunn actúa como un pegamento para toda la canción, que con garra y un uso extraordinario de su hermoso timbre logra construir una interpretación abrumadora. Una canción como esa en otras manos podría haber pasado desapercibida, pero con una voz como esa se convierte en algo muy interesante.
En cuanto al vídeo, «Gimme A Minute» suena sobre una serie de gráficos y efectos especiales, escenarios y personajes que se mezclan entre sí sin tener casi nada en común. Estamos prácticamente en el más indistinto de todos los sueños, hasta el punto de que la presencia humana es tan pequeña como para pensar en un producto generado completamente en la computadora, y el efecto en el espectador es ciertamente muy particular.
