En marzo de 2018, la relación entre Justin Bieber y Selena Gomez terminó definitivamente, después de varios altibajos. Aproximadamente ocho años después, la cantante estadounidense le dio a NPR’s Weekend Edition Sunday una entrevista en la que, además de centrarse en su último capítulo discográfico, «Rare«, Selena Gomez recordó su relación con el ídolo pop canadiense.
Ante la pregunta de si dejar Bieber fue uno de los momentos más difíciles y dolorosos de su vida, la voz de «Lose You To Love Me» respondió: «No, porque encontré la fuerza para hacerlo. Es peligroso tener una mentalidad de víctima. No soy irrespetuosa, creo que fui víctima de un tipo de abuso».
Al no haber especificado a qué tipo de abuso se refería, la presentadora Lulu García-Navarro le preguntó a Gómez si podría clasificarse como «abuso emocional»: «Sí, y creo que es algo de ese tipo. Pero encontré una forma adulta de entenderlo» respondió la cantante, nacida en 1992. Continuó: «De la misma manera que no quiero pasar el resto de mi vida hablando de eso, estoy realmente orgulloso de poder decir que me siento tan fuerte como nunca me he sentido y he encontrado la manera de superarlo de la mejor manera posible».
Los dos artistas comenzaron su relación cuando aún eran muy jóvenes. Hablamos de 2011, cuando Selena Gomez tenía 18 años y Bieber tenía 16 años, y la unión entre los dos cantantes terminó en 2012, con pequeñas ocasiones de re-encuentro hasta la despedida final, que tuvo lugar en 2018. Después de la relación con Bieber, la cantante se comprometió con The Weeknd. En cuanto al cantante canadiense, que lanzará su nuevo álbum «Changes» el 14 de febrero, el artista se casó el año pasado con Hailey Baldwin.
Aunque no se sabe exactamente qué quiere decir Gómez al confirmar la definición de «abuso emocional», NBC informa que la expresión define, según la clasificación de la Coalición Nacional contra la Violencia Doméstica, «un tipo de abuso que puede incluir manipulación, abuso verbal, rechazo, intimidación e intimidación«.
