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Robert Plant es un gran artista y puede sobrevivir sin Led Zeppelin. Este disco es la evidencia de la capacidad del legendario cantante de poder demonstrar todavía todo su talento (y no hablamos solo de su voz inconfundible).
LULLABY AND THE CEASELESS ROAR representa un nuevo capitulo de su brillante carrera, como demuestran los experimentos estilísticos que comienza desde pronto en la versión de ‘Little Maggie’ donde un kologo africano desafía un banjo americano ofreciendo un mix multicolor con percusiones tribales, violín y loop electrónicos.
Un gran proyecto de música global, ambicioso, de calidad, gracias al carisma de Plant y las capacidades técnicas de los Sensational Space Shifters.
Plant ha conseguido convencer a sus músicos superar sus convicciones y limites estilísticos para crear algo increíblemente innovador, entre folk, música celtica, trip hop y blues.
No es un caso que el disco haya sido grabado en los estudios Real World de Peter Gabriel, otro aventurero de la música y sorprenden los sonidos misteriosos de ‘Embrace another fall’ que funciona como espejo de la fusión general de la obra.
Hay un cambio radical en la forma de cantar del ex Led Zeppelin: sus cuerdas vocales carician ahora nuestros oídos, se convierten en susurros, con imprevisibles falsetes y un lirismo intenso.
Plant sigue teniendo el alma de un joven de los años 60, capaz de hablar de almas, energía vital, arcoíris y viajes espirituales, construyendo melodías que se mueven entre África y Oriente Medio, como cuando canta ‘Arbaden’ en idioma fulani, pueblo nómada más grande del mundo.
Un disco único, innovador, en una sola palabra: imperdible.
- 01. Little Maggie
- 02. Rainbow
- 03. Pocketful of Golden
- 04. Embrace Another Fall
- 05. Turn It Up
- 06. A Stolen Kiss
- 07. Somebody There
- 08. Poor Howard *
- 09. House of Love
- 10. Up on the Hollow Hill (Understanding Arthur)
- 11. Arbaden (Maggie’s Babby)