La banda de hard rock y heavy metal Motörhead se separó en 2015, después de 40 años de carrera artística. La despedida siguió a la trágica desaparición de su fundador y líder histórico, Ian Fraser Kilmister. Conocido por todos simplemente como Lemmy, murió el 28 de diciembre de 2015 a la edad de 70 años.
El cantante y bajista sigue siendo un auténtico ícono del rock en todas sus formas, sin embargo no todo su material musical ha sido publico. De hecho, un anuncio importante ciertamente hará felices a millones de fans del grupo británico, aún ansiosos por escuchar nuevas canciones.
Nuevo disco de Motörhead en 2020
El esperado anuncio vino del guitarrista Paul Kilmister, hijo de Lemmy. De hecho, el joven músico ha confirmado el lanzamiento futuro de un disco con pistas regrabadas, titulado ‘Gods Of The Arena’. El lanzamiento parece estar programado para el período de Navidad 2020, aunque todavía no hay una fecha oficial.
Lo que se sabe es que el álbum consistirá en un conjunto de canciones que el carismático bajista y cantante de Motörhead consiguió terminar, antes de morir.
El propio Lemmy trabajó en este interesante proyecto discográfico junto con el guitarrista Bob Kulick, ex de integrante KISS y WASP. Las canciones fueron preparadas entre los años 90 y 2004 y fueron revisadas por Paul Kilmister mismo. El baterista de ELO Greg Bisonette y el ingeniero de sonido de Metallica Mike Gilles también participaron en este disco postúmo.
El sucesor de ‘Bad Magic’
El último álbum de estudio de Motörhead fue publicado en 2015 y se titulaba «Bad Magic». A pesar de los 40 años de carrera y las muchas vicisitudes que han involucrado a la banda durante su viaje, el disco es considerado por muchos como un auténtico manifiesto del rock de los años 2000.
Desde el metal crudo y crudo de Victory or Die hasta la energía pura de Thunder & Lightning, desde los sonidos evocadores de The Devil, embellecidos por un solo de guitarra de Brian May de Queen, hasta el rock clásico de Teach Them How to Bleed, hay numerosos perlas que merecen ser talladas en la memoria. Sin olvidarnos el homenaje a Rolling Stones con una sugerente versión de Sympathy For The Devil.
