Good In Goodbye es el título del primer sencillo de Madison Beer que anticipa su álbum debut que saldrá en 2020. Beer es la personificación de la generación «Girl Boss». Estas sus declaraciones que han acompañado el estreno del videoclip oficial de su primera canción como solista:
«¡Es tan emocionante lanzar la canción que anticipa mi álbum de debut! Good in Goodbye, toca un tema que resonará en todo el álbum y es una canción sobre las ropturas. Habla acerca de cómo cortar los lazos con una persona tóxica, no importa cuán difícil pueda ser en ese momento, a veces es el único camino a seguir y siempre debes encontrar lo «bueno» en un «adiós». También toca la dualidad de condena y autorreflexión que a menudo atraviesas al final de una relación, Un concepto que cobra vida en el vídeo en el que profundizo mis demonios internos, interpretándome a mí misma y a mi gemela mala».
El vídeo de ‘Good In Goodbye’
En el cautivador vídeo de ‘Good In Goodbye’, que Madison dirigió personalmente, la chica se enfrenta a su oponente más fuerte, ella misma. Se trata de un atractivo vídeo estilo videogame caracterizado por un colorido poder de fuego, estrellas ninja y mucha personalidad. El vídeo que representa el himno definitivo para la era ASMR.
Quién es Madison Beer
Antes de firmar con Epic Records el año pasado, Madison logró un éxito sin precedentes como artista independiente con First Access Entertainment. Su primer EP As She Pleases totalizó más de 700 millones de transmisiones y la convirtió en la primera artista solista femenina en ingresar a las listas de radio Top 20 después de debutar en el Top 5 en iTunes en 18 países y en el Top 10 42 países en todo el mundo.
Atrajo la atención de Time, Complex NME, The Guardian y Billboard, quienes lo nombraron en su «21 Under 21» y sus redes sociales excedieron 14.3 millones en Instagram y 2.5 millones en Twitter.
Este 2020 ve a la artista nacida en Nueva York en 1999, comenzar su colaboración con Sony Music, quien lanzará su álbum debut creado artísticamente por First Access Entertainment y con licencia de Epic Records. Este arreglo permitió que Madison no se distorsionara, dejando su control creativo completo a través de la escritura de sus canciones, von la producción y creación de sus propias imágenes.
