El 21 de septiembre Eros Ramazzotti dio por finalizada su gira por Europa, y lo hizo en Madrid. Junto con Barcelona fueron las dos ciudades españolas elegidas para presentar su último disco: ‘Somos‘ (Noi en italiano).
A las 21:30, tal y como estaba previsto, el cantante salió al escenario con su guitarra. El escenario era un enorme cubo que se elevaba y se partía en dos para dejar paso al artista.
Eros saludó con un simpático “¡Hola Madrid, vámonos!”, y mostró a su público la parte trasera de su camiseta en la que llevaba escrito MADRID. Advirtió que no recordaba muy bien el español, ya que siempre canta en italiano, y dio muestras de ello interpretando gran parte de sus canciones en su lengua materna.
El Palacio de los Deportes de Madrid estaba lleno de un público de mediana edad, convertido por unas horas, en los adolescentes que fueron en los noventa.
A punto de cumplir los cincuenta, Ramazzotti demostró que sigue siendo el mismo que hace treinta años, marcándose un movimiento de caderas con el que sus fans enloquecieron. Con su característica voz nasal, el italiano interpretó temas de su último trabajo, pero su público se puso en pie cuando sonaron los temas más antiguos.
El momento más tierno de la noche fue cuando subió a una niña al escenario , y cantó con ella “Un ángel como el sol tú eres”, primer single de su último disco. Luego cogió la cámara que llevaba la niña y tomó una foto de los dos juntos.
Su numerosa banda, formada por el guitarrista Kirk Fletcher entre otros, y sus coristas Sara Bellantoni y Lidia Schillaci hicieron las delicias del público masculino.En un momento del concierto, el cantante italiano bajó del escenario y se mezcló con su público, del que se siente tan orgulloso.
El final del concierto estaba cerca, Eros pronunció “Te quiero, Madrid”, la gente se puso en pie y cantaron junto a él “Un ángel como el sol tú eres”, y “La cosa más bella”, dos temas que cantó en español.
Hubo diferentes opiniones, ya que había gente a la que le gustaba oír las canciones en su lengua original, y otros tantos que se quejaron porque no se sabían las canciones, ya que compran sus discos en nuestro idioma. Dicen que hace años, en otro concierto que dio en la capital, Eros leyó literalmente los temas en español directamente de una hoja de papel.
De todas formas, el italiano sigue enamorando, ya sea cantando en su lengua o en la nuestra y seguirá llenando auditorios allá donde vaya.