Todos conocemos los hábitos típicos de casi todas las rockstars de los años Sesenta y Setenta (y no solo), así que no es ninguna sorpresa acercar el nombre de un grupo como Black Sabbath al utilizo de drogas, dentro y fuera del escenario…
Pero cuantificar los gastos para esas sustancias es casi siempre imposible y aleatorio. Ahora pero los medios británicos dan por cierta la cantidad de dinero ‘invertida’ por Ozzy Osbourne (1948) y compañeros en 1972 para la compra de cocaína: se habla de alrededor de 75.000 dólares gastados.
Durante una entrevista con el Guardia, el guitarrista Toni Iommi, coetáneo de Ozzy, ha declarado:
“Éramos un grupo de chicos inmaduros y descontrolados… Hacíamos los que queríamos, sin ningún tipo de limite. Dios solo sabe toda la cocaína que me tomaba en esa época…”.
Es sorprendente como el álbum ‘Black Sabbath vol. 4′, publicado en 1972, costó 60.000 dólares, es decir, unos quince menos de la cantidad pagada para el famoso polvo blanco. En su autobiografía ‘I am Ozzy’, el cantante del grupo desvela que los miembros eran tan adictos a la coca que el disco hubiera tenido que titulares “Snowblind”, casi una dedicatoria a la droga, pero el sello puso su veto pero Black Sabbath consiguieron añadir, en la portada, la irónica frase “Nuestro más sincero agradecimiento a la grande Coca-Cola Company de Los Ángeles“
Los excesos de ese periodo hubieran podido ser nefastos para el baterista Geezer Butler, como recuerda Ozzy:
“Durante el tour promocional del disco, tomó algo cortado con acido y tuvimos que detenerlo varias veces mientras intentaba salta de la ventana del hotel”.