Tenia 92 años, Ravi Shankar, maestro indiano del ‘sitar’, instrumento a cuerdas típico de la tradición musical de India.
Ravi es el padre de la Música Nueva del Mundo o World Music y ha influenciado muchos artistas extranjeros, cantantes, rockstar y grupos del calibre de Beatles hasta músicos y artistas de música clásica, como el violinista Yehudi Menuhin. El guitarrista George Harrison fue su alumno y juntos organizaron un importante concierto de beneficencia en Bangladesh en 1971. Dos años antes, en 1969, participó en el festival de Woodstock exhibiéndose junto a Janis Joplin y Jimi Hendrix en frene a más de 500 mil personas.
Su ultimo concierto es del pasado 4 noviembre, cuando actuó en Long Beach, California, con su hija Anushka.
Nacido en 1920 en la sacra ciudad de Varanasi, de padres brahmini, Shankar deja su mujer Sukanya y las dos hijas, Anushka (como el padre artista de sitar) y la famosa cantante Norah Jones.
Ha sido la familia del grande artista indiano a comunicar la noticia de su muerte, en un hospital de San Diego (California, EEUU). Ravi Shankar hace unas semanas había sufrido una intervención al corazón y en los últimos días sus condiciones parecían normalizarse.
El primer ministro indiano, Manmohan Singh ha enviado un mensaje de pésame a nombre de todo el país asiático a la familia Shankar, definiendo Ravi como “Tesoro nacional y embajador de la cultura de India en el mundo, un hombre y un artista inolvidable por su carisma, su genio y su humildad“.